En México, diversas entidades públicas y privadas realizan actividades orientadas a la promoción de la inversión extranjera en este país.

En el ámbito público, las principales entidades gubernamentales de promoción de la inversión extranjera son ProMéxico, la Secretaría de Economía, la Secretaría de Relaciones Exteriores y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público. Además, todos los estados de la República, así como varias entidades municipales y ciudades, cuentan con organismos de desarrollo económico que promueven la atracción de inversión a sus respectivas regiones.

En relación con la iniciativa privada, todas las Cámaras de Comercio y de Industria federales, estatales y locales realizan tareas de promoción de la inversión extranjera.

También existen asociaciones especializadas en la promoción de la inversión extranjera, como la Asociación Mexicana de Parques Industriales (AMPIP), que agrupa a los principales parques industriales del país.

México cuenta con un marco de referencia para la atracción de inversiones muy consolidado, habida cuenta que se trata del segundo país latinoamericano que más inversión directa ha recibido en el periodo 2000–2010, después de Brasil. En este sentido, España es uno de los mayores inversores en la última década con una cantidad aproximada de 26.300 millones de euros, que lo sitúa en el primer destino de las inversiones españolas en Iberoamérica.